Las voluntarias que se desplazaron el mes pasado a Puyo, en Ecuador, para acompañar a la comunidad educativa que desarrolla su labor con los menores más desfavorecidos de una de las regiones más inaccesibles del país, están a punto de concluir su experiencia. En esta actividad, organizada de forma conjunta por las Cáritas diocesanas de Castilla y León, han estado ofreciendo apoyo escolar y de tiempo libre, y también se han unido a la comunidad en sus celebraciones litúrgicas y festivas. Además, han dedicado algún día a conocer el entorno, y han compartido algunas imágenes.
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